Explora una Bodega y Degusta una Selección de Vinos
Una experiencia auténtica, una vista genial: una visita a una bodega con una cata de vinos es uno de los mejores momentos para los verdaderos amantes del vino. Disfrutar de los sabores de un buen vino, comentar con el sumiller sus características, la ubicación de la bodega y finalizar con una bodega compartida con los amigos: ¿Qué más se puede pedir?
En la bodega descubriremos los secretos del vino. Según el origen de la bodega, sus exquisitas cepas y variedades, experimentaremos una variedad de sensaciones que van desde el sabor a frutas maduras hasta el sabor alegre a miel para el dulce. Con la eficiencia y conocimientos del experto sumiller, conocerás la profundidad de los vinos, con la ayuda de notas de cata.
Finalmente, para el disfrute de tus sentidos, se compartirá una selección de vinos acompañados de una selección de quesos elegantes y ahumados. Desde vinos tintos secos hasta blancos dulces pasando por la amplia variedad de champagnes y espumosos, la cata será una explosión de aromas, sabores y texturas. Una vez que la cata haya terminado, no se te olvide una copa para compartir con tus amigos y degustar el vino mientras hay una interesante conversación con el sumiller.
Una visita a una bodega con una cata de vinos es sin duda una gran experiencia. No sólo es una oportunidad para degustar alguno de los vinos de mayor prestigio, sino también para descubrir la cultura detrás de la elaboración del vino. La cata hará que aprendas mucho sobre los vinos y su elaboración, mientras que compartir una copa con los amigos hará de la experiencia una inolvidable. Uno no olvidará este momento único con los sentidos y la memoria.